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sábado, octubre 5, 2024

El equipo de Caputo asegura que aprobó su primera auditoría con el FMI y en mayo llegarían US$ 800 millones

  • El ministro busca más recursos para iniciar la transición.

El Gobierno está confiado en que aprobará la octava auditoría con el Fondo Monetario. Nicolás Posse y Luis Caputo viajaron este martes a la noche a Washington con esa certeza y de que lograrán el apoyo clave del Congreso para reforzar el ajuste fiscal el resto del año.

“No solo cumplimos las metas, conseguimos un resultado espectacular, hace años que un gobierno no aprobaba las metas sin waivers (dispensas)”, dijo una alta fuente del Ministerio de Economía.

Caputo participará de la reunión de primavera del organismo y el Banco Mundial, un evento que reúne todos los años a los ministros de Finanzas del mundo. En ese marco, aprovechará para reunirse con las autoridades del FMI y el Tesoro de EE.UU, y avanzar en una nueva revisión trimestral del programa vigente, una instancia en la que se evaluará el cumplimiento de metas del primer trimestre, es decir, buena parte de los primeros 100 días de Javier Milei.

En el plano de las reservas, el Gobierno se comprometió a acumular US$ 6.000 millones netos desde el 10 de diciembre. Milei asumió con un saldo negativo de 11.000 millones y a fines de marzo se encontraba en un rango negativo de entre US$ 1.500 y 2.700 millones (según se incluya o no la deuda a pagar por los bonos Bopreal), lo que implica una variación positiva de más de US$ 8.000 millones y un sobrecumplimiento del 40%.

El Banco Central logró obtener los niveles más altos de reservas netas en diez meses, manteniendo el cepo cambiario y pateando pagos de divisas con la colocación de deuda en dólares a importadores por US$ 8.000 millones.

Hacia delante, se espera que la liquidación de la cosecha descomprima el panorama, pero hasta el 1 de mayo habrá que pagar US$ 2.800 millones al FMI, lo que va a impactar en el stock de dólares, según coinciden PPI, ACM y Aurum.

El ministro también acordó un superávit fiscal de $ 962.000 millones en el primer trimestre, es decir, más ingresos que gastos (sin contar el pago de intereses de deuda). Si bien el dato de marzo se conocerá el lunes próximo, se espera que Caputo lo adelante al Fondo. Por lo pronto, la licuación de las jubilaciones, el recorte de la obra pública y la postergación de pagos de energía permitieron un resultado positivo de $ 3 billones, lo que dejaría margen para cumplir en marzo.

Por último, el Banco Central logró alcanzar la meta monetaria, ya que durante el primer trimestre no tuvo necesidad de financiar el gasto público debido al ahorro producido por el duro ajuste sobre las erogaciones, pese a la caída de la recaudación provocada por el desplome de los salarios y el consumo.

Así, de confirmarse la aprobación de la auditoría, Argentina recibirá un desembolso de US$ 800 millones en mayo, que llegará después de los pagos al organismo.

Caputo acordó en enero con el FMI reflotar el programa caído durante la gestión de su antecesor, Sergio Massa, para financiar el crédito de US$ 44.000 millones que tomó Mauricio Macri en 2018. En ese marco, se comprometió a un superávit fiscal del 2% en 2024 y la emisión cero durante todo el año para asistir al Tesoro como parte de un fuerte apretón fiscal y monetario para bajar la inflación, junto con la acumulación de US$ 7.600 millones.

Después de la devaluación en diciembre y la liberación de precios, Milei avanzó en la suba de tarifas, el aumento del impuesto PAIS y bajó las tasas para licuar la deuda del Banco Central en Leliq y pases, junto con los ahorros. También desreguló actividades mediante el DNU, como las prepagas. Pero el Fondo ve debilidades en el plan, empezando por la falta de apoyo para aprobar la Ley Bases y el paquete fiscal, que incluye una suba del impuesto a las Ganancias.

Sin esos cambios, el FMI cree que es difícil cumplir el programa solo con un ajuste creciente del gasto público. La CGT ya anunció un paro para mayo. En el plano monetario, los analistas observan otros “artilugios”: es que, si bien no hubo adelantos transitorios al Tesoro y la base monetaria se redujo en términos reales, desde febrero el BCRA tuvo que acelerar la emisión de pases (las nuevas Leliq) para absorber la oferta monetaria sobrante.

En el Fondo también piden subir las tasas, acelerar la devaluación del dólar oficial y levantar el cepo. Caputo flexibilizó en los últimos días el pago de importaciones a pymes, pero mantiene el dólar planchado para contener la inflación. Mientras tanto, la liquidación de la cosecha sigue sin aparecer, lo que impulsó una suba de los paralelos y redujo las compras del BCRA. En ese contexto, el ministro busca más fondos que los US$ 800 millones previstos.

NE

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